Buenas relaciones
Martha Gonz�lez
Ser�n las vacaciones o tal vez los diputados andan en gira de investigaci�n para conocer d�nde est� Andorra, pero extra�amente han pasado ya varios d�as y ni los de oposici�n ni los de casa han dicho esta boca es m�a, en cuanto al asunto ventilado en El Pa�s en contra del gobernador Alfredo del Mazo.
Eso habla de que la relaci�n entre los morenistas y el gobernador no es tan mala como se ha planteado, pues sea verdad o mentira, esa era una excelente oportunidad para atacar y no la tomaron.
As� las cosas, se puede esperar que sigan las escaramuzas, pero no parece que haya guerra en ciernes. Por supuesto, a la hora de las elecciones ya se ver�, pero por lo pronto, parece que las cosas fluyen entre ellos y significa que hay buen cabildeo, a pesar de las apariencias.
Econom�a preocupante
Las condiciones econ�micas en el pa�s y, por supuesto, en el Estado de M�xico, no est�n nada bien, aunque el presidente Andr�s Manuel L�pez Obrador asegura que �vamos bien�.
El sector empresarial dice que privan la preocupaci�n y el desconcierto, por lo que est�n todos los sectores contra�dos, sin invertir lo que podr�an y con recortes de personal.
Mientras, en el sector gubernamental siguen sin fluir los recursos en forma normal y los despidos, en todos los niveles, no se detienen.
Ya vimos en d�as pasados a un grupo de empleados municipales despedidos reclamar directamente al presidente, a quien no le hizo gracia alguna el asunto.
Lo cierto es que los indicadores no sin a�n graves, pero van hacia all�, es decir, hay una tendencia negativa.
La preocupaci�n de los empresarios las comparten los ciudadanos y los precios de la mayor�a de los productos aumentan sin explicaci�n.
El ciudadano com�n empieza a sentir que algo pasa y no es bueno.
Ya L�pez Obrador y su gabinete necesitan empezar a dar soluciones para estabilizar el barco, porque aunque no ha pasado ni un a�o de gobierno, los estragos son de llamar la atenci�n.
Es decir, todo inicio de gobierno tiene cierta inestabilidad que es de esperarse por la transici�n y los ajustes.
Era obvio que este cambio ser�a mucho m�s dr�stico, pero no ten�a porque ser negativo, en especial para la econom�a.