Martha Gonz�lez
Ayer el fiscal General del Estado, Alejandro G�mez S�nchez, dijo que de haber entrado antes, hubiera sido posible rescatar con vida a Jessica “N” de las garras del presunto multi femicida de Villas Sant�n.
Resulta que la familia dio una entrevista al diario espa�ol El Pa�s en el que aseguran que estuvieron fuera de la casa donde la joven presuntamente fue asesinada durante cuatro noches con sus d�as, en espera de que las autoridades intervinieran. Cuando finalmente entraron a la casa, lo que encontraron fue el cad�ver de Jessica, que parece habr�a sido asesinada unas horas antes del hallazgo, m�s otros dos cuerpos de mujeres.
El fiscal confirm� que tuvieron conocimiento d�as antes, pero no pudieron intervenir dado que no consiguieron la orden de cateo.
En los d�as anteriores, ya se hab�a ventilado que incluso tuvieron contacto con el presunto asesino, pero para el momento en que obtuvieron la oren del juez, el sujeto se hab�a dado a la fuga y la joven hab�a muerto.
Las declaraciones del fiscal nos llevan a concluir, nuevamente, que a pesar de que hay avances institucionales contra la violencia feminicida, las pol�ticas p�blicas no bajan a la realidad porque siempre resulta que alguien comete un error. En este caso, habr�a que preguntarnos qu� fue lo que detuvo al juez, mientras en otros casos es el Ministerio P�blico quien se niega a recibir la denuncia de desaparici�n o a emitir la alerta de b�squeda por diversas circunstancias, como el tiempo que lleva ausente la v�ctima, a�n cuando la ley indica otra cosa.
Entonces recordamos cu�ntas veces hemos visto que diversos funcionarios, de muchas instituciones reciben cursos de sensibilizaci�n relacionados con el tema, desde la perspectiva jur�dica, de derechos humanos, administrativa y nos preguntamos �por qu� no funciona?
Por qu� si el gobernador Alfredo del Mazo, el fiscal y los secretarios est�n conscientes de la gravedad del problema, el resto de la estructura no reacciona. C�mo es que se hace p�blico cotidianamente la desaparici�n de mujeres y luego el hallazgo de cuerpos mutilados, torturados, violados en formas terribles y quienes tienen el primer contacto con los denunciantes no responden a la urgencia del estos asuntos.
C�mo se justifican ante s� mismos estos empleados gubernamentales que se niegan a colaborar cuando las chicas �o chicos, porque tambi�n ignoran casos de hombres desaparecidos- aparecen sin vida.
Algo est� muy mal en nuestro sistema cuando ni las pol�ticas p�blicas, ni las leyes ni la violencia que nos ataca como un tsunami hace mella en esas conciencias. Y volvemos al inicio, �qu� hacer para que todos cumplamos con la parte que nos corresponde?