La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México logró que un Tribunal de Enjuiciamiento dictara una sentencia de 27 años seis meses de prisión en contra de Óscar Andrés Flores “El Lunares”, líder de La Unión Tepito, por el homicidio de una comerciante.
Aunque El Lunares ya había recibido dicha sentencia, la fiscalía capitalina la presumió como nueva, luego de que la defensa del acusado presentara un recurso de apelación y la reposición del procedimiento penal en contra del líder criminal.
El representante social de la Subprocuraduría de Procesos pudo acreditar de nueva cuenta la responsabilidad del hoy sentenciado en la comisión del delito de homicidio calificado y pidió una pena más alta, a pesar que esto es anticonstitucional.
Ante esto, la autoridad judicial aplicó el principio de NON REFORMATIO IN PEIUS, la cual refiere que quien interpone un recurso de apelación no puede ser colocado en una posición más desfavorable de la que tendría en el caso de no haberlo interpuesto, por lo que se negó la pena que solicitaba la fiscalía.
Al llevarse a cabo la audiencia de individualización de sanciones y reparación del daño, el Ministerio Público también logró que se le ordenara el pago de los conceptos de reparación del daño y gastos funerarios, además de que se le negaron los beneficios y sustitutivos penales por el tiempo que dure la pena, y sus derechos políticos también quedaron suspendidos.
A pesar de esto, la FGJ no ha podido acreditar ante un Juez que El Lunares es líder de La Unión Tepito, uno principales narcomenudista de la ciudad, menos imputar el delito de delincuencia organizada.
En la investigación se señala que El Lunares privó de la vida a una mujer por disparo de arma de fuego en un puesto de comida localizado en la alcaldía Cuauhtémoc, en la colonia Morelos.
Cuando inició el proceso en su contra tras su detención en Hidalgo, la hija de la víctima negó en audiencia que El Lunares haya asesinado a su madre. Negación que hizo y escuchó el líder criminal quien se encontraba en video transmisión.
Sin embargo, la FGJ ofreció la prueba de refutación, consistente en la pericial en materia de psicología en la que se analizó el testimonio de esta persona, estableciéndose que por temor a la figura pública que representaba el sentenciado, declaró que no fue él quien disparó.
El Lunares fue aprehendido por detectives de la Policía de Investigación en febrero de 2020, por tercera ocasión, esta vez al salir del Reclusorio Preventivo Varonil Norte, luego de ganarle en dos ocasiones a las autoridades capitalinas quienes no hallaban cómo dejar en prisión al capo, hasta que imputaron dicho homicidio.