GILDA MONTA�O
Hubiera querido ver su cara: por m�s que le pudieran haber dicho qui�n era y c�mo era, la situaci�n de dos pa�ses y de treinta millones de mexicanos viviendo en el suyo, merec�an todo el talento del mundo para saber escuchar y entender lo que un se�or, presidente del pa�s vecino, dec�a. Y para que fuera, se lo pidi� �creo– de una forma bonita y con gran inteligencia, y lo decidi� escuchar. El ten�a para con s�, la necesidad de seguir luchando hasta el final para su contienda pol�tica, en lugar de que le ganara el rapero West o Biden. Y quer�a de nuevo volver a ser presidente de los Estados Unidos, como casi todos los presidentes que ha habido, excepto muy pocos.
Y sab�a que esos treinta millones de mexicanos que est�n all� metidos, son personas que quieren al presidente de M�xico y que por �l, pueden votar. Solo por �l y no por los insultos que les han proferido. As� que se port� inmensamente bien. Fue un buen ser humano, que hasta dijo que eran amigos. Bueno, hasta lo apapach� lo m�s que pudo. Cuando con gran ingenuidad AMLO dijo: es que muchos cre�an que nos �bamos a pelear, se equivocaron� �verdad Trump?
Marcelo Ebrard le sali� casi todo perfecto. Hasta los tres �Vivas� para M�xico, que le dieron ganas de gritar al final de su intervenci�n a AMLO en la Casa Blanca. Esa que se abri�, para que los treinta millones de mexicanos: –los sin papeles, los con papeles y doble nacionalidad, y los que ya tienen tres generaciones de ser mexicanos, pero viven all�–, votaran por Trump. porque… por qu� no, si enfrente ten�a a los m�s importantes industriales y de paso, a uno de los hombres m�s ricos de la faz de la tierra: Carlos Slim.
La ida en un avi�n que no era ni mucho menos presidencial. Con un sill�n junto vac�o. Con alguna escala, pero con la valios�sima ayuda de la embajadora de M�xico en EUA, la se�ora B�rcenas. Con cara de ganas y de saber que no ser�a ni remotamente maltratado.� Y los discursos que le hicieron y los invitados de �ltima hora que aceptaron todos, con todo y pandemia y que de sopet�n fueron. Como Slim.
Porque con Trump nunca nadie sabe nada: ni c�mo amanezca ese d�a, si con ganas de fregarse a quien se deje. Y ese es casi todo el mundo. A Angela Merkel la dej� con la mano extendida, digo, por si no se acuerdan. Se ha venido recargando en el famoso muro de los lamentos, como se le ha dado la gana, ese que M�xico no tiene ni tendr� con qu� pagar. Muro que, para finales de este a�o, tendr�a cerca de 725 kil�metros construidos, seg�n dijo apenas.
Tambi�n consider� que, si no fuera por el muro, EUA estar�a inundado por el virus. Solo pocos d�as despu�s de la visita de AMLO de quien coment�: �Estuve con un gran caballero, el presidente de M�xico. Hace dos d�as tuvimos una larga charla sobre la frontera sur, donde tienen dificultades, pero est�n haciendo un trabajo fant�stico�. Espero que esa media hora con �l, no haya sido de rega�os ni remotamente. No sabremos nunca. Solo de pedirle que fuera bueno y que los 30 millones de mexicanos que viven all�, volvieran a votar por el en noviembre.
Sabemos muchas cosas que el se�or ha venido diciendo de nuestro bello y dulce pa�s y pueblo, y que de malvivientes no nos baja. �Qu� le hizo cambiar y estar tan apapachador? �Los votos a�n en este tiempo, mueven al mundo!