Con una poblaci�n superior a los 300 mil habitantes, Chalco es uno de los municipios conurbados del Valle de M�xico que no escapa a la expansi�n de su poblaci�n, gracias a la proliferaci�n de conjuntos habitacionales que va en aumento, esto derivado tambi�n a la irregular manera de uso de suelo que da lugar a nuevos asentamientos tambi�n irregulares y a la construcci�n de casas de inter�s social.
Seg�n datos estad�sticos, Chalco cuenta con un total de 77 localidades, 19 urbanas y 58 rurales, municipio ha presentado procesos de ocupaci�n del suelo muy significativos, dados principalmente por dos aspectos como la expulsi�n de poblaci�n de zonas conurbadas del Valle de M�xico y la oferta de predios de uso agr�cola a bajo costo por lo que la ocupaci�n del suelo se ha dado primordialmente por la v�a irregular.
En el municipio se identifican diversos asentamientos humanos irregulares, ubicados en las localidades como Agrarista, Besana Incl�n, Fraternidad Antorchista, San Crist�bal, El Potrero, San Mart�n Cuautlalpan, Santa Mar�a Huexoculco, San Lorenzo Chimalpa, San Mart�n Xico Nuevo, San Mateo, entre otras donde la ocupaci�n se da a partir de las condiciones m�nimas de habitabilidad y servicios.
Hoy en d�a la mancha urbana en Chalco sigue creciendo desmesuradamente tambi�n por la creaci�n de nuevas unidades habitacionales que se localizan en distintos puntos del territorio municipal sobre todo en las inmediaciones de su vecindad con Ixtapaluca que es una demarcaci�n con elevados �ndices de unidades habitacionales que ponen al municipio en los primeros lugares a nivel Latinoam�rica en este tipo de asentamientos.
Chalco no se quedar�a atr�s si con el paso de los a�os no se frena la expansi�n del negocio de casas considerando que en su territorio existen a�n grandes extensiones de tierras que dejaron de ser productivas y que son una tentaci�n para los empresarios de la vivienda.
Actualmente la venta de departamentos en unidad habitacional en Chalco est� a la orden del d�a y a trav�s de anuncios publicitarios y frases tentadoras se ofrecen las casas que se describen como espacios �los m�s apropiados� para que las familias se puedan formar un patrimonio.
Gregorio Manr�quez