Este domingo de inicio de la Semana Santa dio lugar a que en el centro del municipio hubiera más movilidad de personas en primer lugar porque la gente se vio motivada a acudir a la bendición de sus ramos.
A pleno día, circulaba la gente por las calles del primer cuadro, el comercio estuvo abarrotado y dese temprano la movilidad se registró en los negocios del tianguis fijo, las plazas comerciales, cajeros automáticos, puestos de comida y sobre todo en torno a la parroquia y el jardín principal se veía a más personas.

Los restaurantes se vieron ocupados, el transporte público de pasajeros con alta demanda y en general hasta esta tarde se aprecia un ambiente no tanto de “nueva normalidad” sino cómo la pandemia ya hubiera terminado la pandemia.
Como es normal, el intenso calor obliga a las personas a buscar la sombra de los pocos árboles en el centro y hasta de los edificios, igual todos buscaban ingerir líquidos para hidratarse.Este primer día de Semana Santa es posiblemente el preámbulo de cómo se vivirán los siguientes días de asueto por la Semana Mayor en la región de los volcanes.
Gregorio Manríquez H