“Hoy en Nicol�s Romero estamos gobernando sin filias ni fobias. Hoy, en Nicol�s Romero, se logran grandes cosas cuando se construye desde las coincidencias con quienes piensan diferente”, destac� el presidente municipal de Nicol�s Romero, Armando Navarrete L�pez, al inaugurar la Casa de Salud Nicol�s Romero”, en la comunidad de Casa Vieja.
Asimismo, devel� la placa que simboliza la puesta en marcha de esta casa de salud, que se ubica en el poblado de Cahuac�n, para beneficio de 12 mil personas.
Garantiza acceso a servicios m�dicos
Asegur� que est� al garantizar el acceso de la poblaci�n a estos servicios, es una prioridad para su gobierno, porque este municipio es de derechos y libertades.
Navarrete L�pez estuvo acompa�ado por la presidenta del DIF local, Anel Roa Vargas, integrantes del cabildo y l�deres de la organizaci�n Antorcha Campesina, con la que se suscribi� un convenio de colaboraci�n con el que se concret� la puesta en marcha de dicho lugar.
Mayores espacios
Destac� la importancia de que se pueda contar en Nicol�s Romero, con mayores espacios de este tipo, pues se logran grandes cosas cuando se construye desde las coincidencias con quienes piensan diferente, se comparte una visi�n y se le cumple a los nicolasromerenses, como se ha hecho con la entrega de este lugar a la comunidad.
Record� que, al ser la salud un pilar fundamental de su gobierno, el esfuerzo que se realiza todos los d�as en este rengl�n, ha sido ampliamente reconocido, de lo que es prueba que, en 2021, se le otorg� a Nicol�s Romero la categor�a de Ciudad de la Salud.
Mencion� igualmente que, a trav�s de las gestiones realizadas, el clima de buen entendimiento que existe con el IMSS y el cabal cumplimiento de los requisitos solicitados, el pr�ximo a�o se edificar� en el municipio el hospital regional m�s grande del Seguro Social en el Estado de M�xico.
Agradece Antorcha Campesina
Javier �lvarez Ortiz, dirigente de Antorcha Campesina en la regi�n noroeste del Estado de M�xico, agradeci� a Armando Navarrete, por su voluntad pol�tica de apoyar al pueblo se�alando que esta obra no era m�s que un elefante blanco en otros tiempos.
Manuel Venegas