Desde que el presidente Andr�s L�pez Obrador fue esbozando lo que ser�a su oferta de campa�a y su gobierno, asegur� a los mexicanos que, si �l llegaba al poder, nunca m�s el gobierno usar�a a las instituciones de justicia para dirimir diferencias pol�ticas, como se hizo durante muchos a�os en anteriores reg�menes.
El uso faccioso de la justicia, en muchos pa�ses ha sido la constante, y por ello, existen los mecanismos impulsados por las agencias de la ONU, como el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, o modelos de protecci�n como el asilo pol�tico, mecanismos que protegen a quienes se ven amenazados o perseguidos por sus gobiernos, a consecuencia de actos no delictivos o formas de pensar distintas.
Un r�gimen democr�tico, tambi�n entre otras, se distingue por respetar todas las formas de pensamiento, la lucha ideol�gica y hasta la cr�tica, que siempre resulta inc�moda.
Podr�a decirse que son las formas m�s comunes de �producir� presos pol�ticos o perseguidos pol�ticos, pero existen otras formas m�s perversas de usar a las instituciones de procuraci�n y administraci�n de justicia para acallar, para publicitar y para fingir una lucha contra la corrupci�n y el ejercicio de la justicia en momentos decisivos de los procesos electorales.
Los tiempos en que sali� la solicitud de la Fiscal�a General de la Rep�blica para que la C�mara de Diputados retire el fuero constitucional al gobernador panista en funciones de Tamaulipas, Francisco Javier Garc�a Cabeza de Vaca, no pudieron ser m�s precisos.
Pues de acuerdo con el proceso para el juicio de procedencia que ya inici� y al que se le somete al panista, dan esos tres meses que faltan para que se realicen los comicios intermedios del actual sexenio, comicios en los que se renovar�n los 500 diputados federales, 15 gobernadores, miles de alcald�as y varios congresos locales.
El ambiente y la efervescencia pol�tica se vivir� como nunca en los pr�ximos tres meses, pues desde hace a�os, se han ido moviendo las fechas de elecciones estatales para hacerlas coincidir con las federales y as� evitar que el pa�s est� todo el tiempo en campa�as y procesos electorales que cansan a los ciudadanos. Por eso es que a �sta, se le llama la �elecci�n mas grande de la historia�.
Y en ese contexto habr� de desahogarse y resolverse el asunto del desafuero del gobernador panista de Tamaulipas, en pleno proceso electoral y es innegable que tendr� importante repercusi�n, en el �nimo de los electores. A Garc�a Cabeza de Vaca se le acusa de delincuencia organizada, de lavado de dinero y de evasi�n fiscal, por el hecho de haber realizado una operaci�n de compraventa de un inmueble.
Por si esto no fuera suficiente, tambi�n aparece en el escenario de la opini�n p�blica la persecuci�n al ex gobernador de Nayarit, Roberto Sandoval Casta�eda, que junto con su hija Lidy Alejandra son acusados de enriquecimiento inexplicable, a quien se les encontr� como due�os de decenas de inmuebles con valore millonarios.
Hace seis a�os que Sandoval sali� de su per�odo como gobernador, apenas se le est� buscando, si hubiera sido por encubrimiento del gobierno federal priista del sexenio pasado, desde hace dos a�os se le hubiera perseguido, pero no.
Pareciera que, en este momento, dos gobernadores de partidos de oposici�n al gobierno actual son acusados, perseguidos y seguramente ser�n linchados medi�ticamente. La pregunta es: �Acaso no se usa el ejercicio de la acci�n penal y a las instituciones de justicia para arreglar cuentas pol�ticas?
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Por Mart�n de J. Takagui