Devastadores resultaron las conclusiones de los primeros an�lisis y peritajes de la estructura de la L�nea 12 del Metro. Frente a la gravedad de las condiciones en que se encontraron las ballenas, uniones, soportes y el concreto del tramo elevado de ese sistema de transporte p�blico, ser�a criminal reiniciar la prestaci�n del servicio a los usuarios.
El mi�rcoles pasado la empresa noruega Det Norske Veritas (DNV) present� junto a la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, el dictamen preliminar de la desgracia por el colapso del tramo de la L�nea 12 del Metro, el pasado 3 de mayo, que dej� como saldo m�s de cien personas heridas y 26 muertas.
As� se destap� la primera cloaca, que no deja dudas de que las estructuras de hierro y concreto del tramo elevado, simplemente est�n p�simamente construidas, no cuenta con una soldadura profesional, los pernos de sost�n est�n incompletos y el concreto es irregular.
Se trata del an�lisis del tramo colapsado de la estructura, pero no se puede determinar si dichas uniones fueron las �nicas mal hechas y para determinar si hay m�s tramos en esas mismas condiciones, pr�cticamente tendr�a que desarmarse cada una de las uniones como la que se venci� en el momento en que circulaba un tren.
Por si eso fuera poco, ayer jueves, se present� otro avance de las observaciones y revisi�n f�sica de las estructura de la L�nea 12, realizada por el Colegio de Ingenieros Civiles de M�xico (CICM), que recomend� no reiniciar la operaci�n del tramo elevado de la L�nea 12 si no hay una revisi�n detallada y, en su caso, se obtenga el informe de vulnerabilidades correspondiente.
Y es que se encontr� que 68 por ciento de los tramos observados requieren de mantenimiento, pero el 32 por ciento restante requiere de un trabajo de reforzamiento, toda vez que hay equipamientos y uniones que est�n incompletas, adem�s de que todo ello representa un alto riesgo.
Ni en los tramos elevados ni en la zona del t�nel, los ingenieros pueden dar su aval, para que se restablezca el servicio, pues todas esas afectaciones deb�an haber sido atendidas y en este momento, sin que se realicen las obras correspondientes ser�a alto riesgo para los usuarios.
En la zona del t�nel, se encontraron goteras muy graves, lo que genera humedad y reblandecimiento del subsuelo; en tanto que los trenes presentan deficiencias que hacen necesario el mantenimiento profundo que solamente puede brindarse en los talleres de Tl�huac, hasta donde no pueden llegar los trenes, debido a que las v�as est�n colapsadas.
Aqu� se ven las muestras de que el problema no es de mantenimiento ni de un percance fortuito, es consecuencia de una mala y deficiente construcci�n, es claro que no hubo una supervisi�n ni la verificaci�n de las condiciones de construcci�n, pues hab�a faltantes de materiales y uso de insumos que no eran de la calidad requerida.
Las cosas no pueden acabar con la simple suspensi�n del servicio, hay personas muertas, hay personas heridas y da�adas de por vida; hay da�o patrimonial incalculable, las reparaciones tendr�n costos millonarios, las responsabilidades deben deslindarse y deben aplicarse sanciones.
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Por Mart�n de J. Takagui