Adi�s a la civilidad pol�tica
Martha Gonz�lez
En las comparecencias, lo que en un principio parec�a ser�a un escenario de cordialidad, todo deriv� en gritos y sombrerazos de los legisladores contra el Secretario de Finanzas, Rodrigo Jarque, quien estoico nunca cambi� su postura: los recursos se ministraron sin distinci�n.
Como era de esperarse, los diputados se le fueron encima con aquello de que el Fefom no se entreg� de manera adecuada y �l defendi� siempre que los municipios que se quedaron sin el recurso no pudieron cumplir con los requisitos que exige la ley.
Lo cierto es que los diputados hab�an acordado que no habr�a manifestaciones en favor ni en contra, incluso el perredista Omar Ortega se lo record� al presidente de la mesa durante la comparecencia de Alejandro Ozuna y le pidi� llamar al orden.
Sin embargo, la civilidad dur� poco luego de la llegada de Jarque Lira al Pleno.
Lo cierto es que el Fefom se ha politizado a un punto grave, pues la oposici�n, en particular Morena, insiste en que son argumentos pol�ticos los que llevaron a retener los recursos, mientras que el gobierno estatal se sostiene en que no fueron todos los municipios capaces de cumplir con la ley.
Seguramente la verdad est� en medio. Es probable que las administraciones municipales no tuvieran la capacidad para cumplir en tiempo y forma, lo que aprovech� la administraci�n estatal para �ponerse exigentes�.
Total, el caso es que el tema sirvi� para la confrontaci�n en el Congreso y dar� para m�s, a pesar de que hay otros puntos importantes para discutir y que fueron apenas tocados.
Uno de ellos es el relativo a la deuda y c�mo las APPs no son considerados deuda, pero en realidad s� lo son, pues hay que hacer pagos millonarios a largo plazo, pero eso ya se discutir� en la siguiente Glosa.
Mientras tanto, Alejandro Ozuna tuvo los mayores aprietos con el tema de inseguridad, que no es su labor directa, pero le toc� responder y repiti� lo que ha dicho anteriormente: apoyo total a la estrategia federal.
El fallo en su argumento sigue siendo el mismo: el gobierno mexiquense tiene responsabilidad y atribuciones directas sobre este tema en el territorio estatal.