Este fin de semana, la historia del peque�o Tadeo nos conmocion� a todos. Enterarnos de que su cad�ver fue sustra�do de forma ilegal de un pante�n en la CDMX para aparecer unos d�as despu�s en el bote de basura de un penal en Puebla, fue tremendo. Es una de esas historias de horror que desear�amos que fuera mentira, pero no lo es.
Es terrible para los padres de ese beb� haberlo perdido a manos de una enfermedad y luego conocer lo que con su cuerpo hicieron sujetos desconocidos, obviamente delincuentes.
Lo peor, que nadie les explique nada, porque hasta ahora, las propias autoridades no tienen la menor idea de c�mo ocurrieron los hechos.
En la Ciudad de M�xico no ni idea tienen de c�mo fue robado el cuerpo ni mucho menos qui�n lo hizo. Eso s�, se apresuran a decir que han ofrecido acompa�amiento de todo tipo a los padres.
Muy bien por ellos, esta familia ha sido victimizada y ha sufrido demasiado, es evidente que necesitan apoyo.
Sin embargo, tambi�n requieren que las autoridades hagan su trabajo fundamental, que en este caso es investigar los hechos y castigar a los responsables, en lugar de lavarse las manos y echarse la bolita unos a otros.
Al final, estos dos gobiernos locales encabezados por morenistas -el de Puebla y el de la CDMX-, toman la misma postura que la del presidente L�pez Obrador: salirse por la tangente.
Ayer, en su conferencia ma�anera, el Ejecutivo federal dijo que lo ocurrido �es fruto podrido de la descomposici�n social, son hechos lamentables que no deber�an de suceder, pero tienen que ver con el pasado reciente, eso es lo que nos dej� la pol�tica neoliberal�.
Es de locos que ya pasada la primera mitad de su sexenio, a�n el presidente de la Rep�blica culpe a los gobiernos del pasado de lo que hoy ocurre con nuestro pa�s.
Es cierto que la descomposici�n social que hoy vivimos no es producto de tres a�os de gobierno de L�pez Obrador, pero tambi�n es verdad que el presidente no ha hecho nada en absoluto para detenerla, ni mucho menos revertirla.
�l es responsable, al menos por omisi�n, de las circunstancias que hoy vivimos, con los peores niveles de inseguridad y violencia que este pobre pa�s haya visto, mientras �l, se ocupa en su testamento pol�tico y ocurrencias parecidas. M�s deber�a preocuparse por la huella que va a dejar, a todas luces lamentable. Es claro que 6 a�os no alcanzan para resolverlo todo, pero al menos una cosa ser�a bueno que estuviera mejor, o ya por lo menos, no peor.