Controversia y politiquer�a
Martha Gonz�lez�
Ayer otra vez los temas de matrimonios del mismo sexo y el aborto generaron controversia en el Congreso mexiquense.
Las bancadas panista y pri�sta defendieron la postura en contra de estos dos temas, mientras que las de izquierda se decantaron a favor.
La discusi�n se desarrollaba al interior de la Legislatura mexiquense, mientras que fuera, varios cientos de personas, se manifestaron por m�s de cuatro horas por frenar las iniciativas que favorecen esas reformas legislativas.
Lo que los manifestantes exig�an era que las propuestas se analizaran y revisaran, porque consideran que ser�n aprobadas de manera �express�, por la fuerza de la mayor�a de izquierda, de la que se espera apoye este tipo de iniciativas.
La realidad es que Morena nunca fij� una postura clara respecto de estos dos temas en campa�a, ni para la presidencia de la Rep�blica ni para las diputaciones �locales o federales-.
En todos los casos la respuesta era que se trataba de temas individuales, personales, en los que mandaban las creencias de cada quien, mientras que en el �mbito legal se�alaban que ya la ley garantizaba derechos para todos �en el caso de uniones homosexuales-.
En el Estado de M�xico, durante el primer periodo todas las bancadas le sacaron la vuelta a ambos asuntos y la discusi�n entre legisladores ha tenido niveles bastante b�sicos. No es novedad, pues al menos dos anteriores legislaturas han mandado a la congeladora las dos iniciativas ante el temor de no ser populares o de perder apoyos de n lado o del otro.
Mientras tanto, la realidad ya los ha rebasado. La diversidad sexual es un asunto tan cotidiano y abierto que suena dram�ticamente incongruente que la discusi�n legislativa contin�e estancada.
La legalizaci�n de uniones del mismo sexo son una cuesti�n de derechos, pues en la realidad existen estas parejas y necesitan resguardo legal en materia de propiedad, servicios de salud y patrimonio.
En cuanto a la despenalizaci�n del aborto, ya miles de mujeres mexiquenses acuden a la Ciudad de M�xico en busca de este servicio y otras tantas arriesgan la vida en condiciones insalubres y completamente irregulares para interrumpir embarazos. La idea es que mujeres inocentes no terminen en la c�rcel por tomar una decisi�n como �sta.
As� las cosas, la politiquer�a de partidos, diputados y l�deres, est� rebasada y deber�a por fin hacerse a un lado.
En cuanto a los ciudadanos que se oponen, tienen derecho de expresarse, como todos los dem�s, sin embargo, las reformas en la ley no afectar�n m�s que a quienes sean del mismo sexo y decidan casarse o quienes necesiten un aborto.
No se trata de promover la homosexualidad ni el aborto, sino de proteger los derechos de todos los ciudadanos de manera igualitaria y ya es tiempo.