Nuestra reflexi�n del d�a de hoy se refiere al incremento de la violencia en contra de las mujeres, quienes han sido el sector m�s afectado, por ser precisamente quienes ocupan diversos roles en el hogar y en muchos casos de manera profesional.�
Por ello, con motivo del d�a de las madres, es importante reflexionar sobre la situaci�n actual en la que se encuentran millones de ellas, ya que derivado de la pandemia del COVID-19, la violencia familiar y los feminicidios aumentaron gravemente.�
Para empezar con esta reflexi�n, veamos que el �ltimo censo del INEGI 2020 report� que de los 126 millones de habitantes en M�xico, 65 millones son mujeres,, es decir, el 51.58% de la poblaci�n; y de los 35 millones de hogares, 10 millones son encabezados por mujeres.�
Este censo tambi�n nos indica que siete de cada 10 mujeres de 15 a�os y m�s, han tenido al menos un hijo nacido vivo (72.4%), lo que representa que las mujeres cada vez tienen menos hijos; en 1999 la tasa global de fecundidad era de 2.86 y en 2019 la tasa se redujo a 1.88 hijos en promedio por mujer. En cuanto a su situaci�n civil, el 47% de las mujeres de 15 a�os y m�s con al menos un hijo nacido vivo, est�n casadas.�
Por otro lado, el 7.0% de las mujeres de 15 a�os y m�s que han tenido al menos un hijo nacido vivo son madres solteras. En este rubro las cifras muestran que del total de madres solteras, el 3.2% no tiene instrucci�n, 46.4% tiene educaci�n b�sica, 26.0% tiene educaci�n media superior y 24.3% tiene educaci�n superior. La tasa de participaci�n econ�mica de las madres solteras es de 75.2%, el 27.9% de las madres solteras ocupadas en el mercado laboral tiene de 15 a 29 a�os; m�s de la mitad (50.4%) son de 30 a 49 a�os y 21.7% tienen 50 o m�s a�os.��
Ahora bien, actores derivados de la pandemia como; frustraci�n, p�rdida de empleos, convivencia obligada por el aislamiento, estr�s, entre otros; coadyuvaron en el incremento de casos de discriminaci�n, revictimizaci�n, abandono, violencia familiar y feminicidios.��
�El?Instituto Nacional de Geograf�a y Estad�stica (INEGI)?cuenta entre sus encuestas regulares, con la Encuesta Nacional de Seguridad P�blica Urbana (ENSU) y en la edici�n de septiembre de 2021, se incluy� un tabulado relativo a la presencia de violencia en los hogares. Al respecto se estima que en el pa�s hay 18.31 millones de hogares en las 91 ciudades que son incluidas en la mencionada ENSU. De esa suma, entre enero y septiembre del 2021 habr�a 1.36 millones de hogares en los cuales se declara que ha habido v�ctimas de violencia en el contexto familiar, con una suma aproximada de 2.76 millones de personas violentadas.�
Para dimensionar la magnitud de estas cifras, el promedio -entre enero y septiembre de 2021-, fue de al menos 5,037 casos de violencia por d�a, es decir, 209.8 casos por hora.��
Otras lamentables cifras son la cantidad de llamadas de emergencia vinculadas con incidentes de violencia contra las mujeres, que en el primer trimestre de 2022 alcanz� casi las 74,600.��
Por otra parte, seg�n datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad P�blica (SESNSP), desde el 2015 y hasta enero de este 2022 se registraron 5,790 v�ctimas, teniendo un alza de 121.6% en el n�mero de v�ctimas, ya que a�o con a�o las cifras no han dejado de crecer.��
De igual manera, las cifras de desapariciones de mujeres y feminicidios, d�a a d�a van en aumento y parecieran incontrolables por los gobiernos, lo cual genera una grave situaci�n de vulnerabilidad de las mujeres e inseguridad para realizar las actividades cotidianas de manera segura, con la zozobra de no saber si regresar�n a casa a salvo con sus familias, tema que abordaremos en una siguiente reflexi�n.�
Los datos anteriores son importantes, porque nos permiten analizar y tener una visi�n m�s amplia de la situaci�n actual de las mam�s mexicanas, a fin de para focalizar esfuerzos en aquellos aspectos donde sean m�s vulnerables y requieran de mayor ayuda a trav�s de diversos programas y acciones como; servicios m�dicos, jur�dicos-asistenciales, alimenticios, econ�micos, entre otros, que est�n enfocados a la atenci�n integral de sus necesidades y la de sus familias.��
De esta manera queda claro que falta mucho por hacer para garantizar a las mujeres a plenitud sus derechos fundamentales, no obstante, debemos reconocer que cada vez crece el n�mero de mujeres que asumen el liderazgo de las familias; y que son quienes representan un gran activo para construir el pa�s que queremos y merecemos.��
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@CaritinaSa�nz�
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