Atravesamos un momento en M�xico que particularmente nos lleva a los caminos de las leyes, las instituciones de atenci�n o procuraci�n de justicia; jueces y tribunales tanto penales como civiles y hasta electorales, todo ronda sobre reclamos, exigencias y argumentos de justicia o injusticia.�
Hablar de la justicia no es nada f�cil, no solo por lo subjetivo o altamente interpretativo que puede resultar esta palabra.�
Pareciera, y eso cr�anme que le ha causado mucho da�o al desarrollo y entendimiento social de esta palabra, pero bueno, pareciera que solo en su debate y esclarecimiento solo est�n destinados los abogados o leguleyos, cuando lejos de eso, su contenido se encuentra m�s all� de las leyes.�
�Qui�n define lo que debe entenderse por justicia?�
�Solo los jueces son los autorizados para determinar que es lo justo? �La sociedad no puede tener su propio sentido de justicia y concepci�n de justicia?�
Precisamente este es una de las razones de lo que hoy en d�a debe ser entendido por justicia.�
No solo aquello que los jueces dicten como lo justo o injusto, y la raz�n es muy clara, la gran mayor�a de nuestros jueces, ya sean de pueblo o de tribunales federales, deciden con base en leyes, no con base en la justicia.�
Hoy decir que un juez dict� una sentencia, habla de que en un problema jur�dico que se le plante� aplic� leyes, pero en realidad no necesariamente bajo un sentido de justicia.�
Aqu� es donde yace el problema de socializaci�n de la justicia, o el popular reclamo de injusticia a diario, no obstante que los jueces hayan dictado una u otra sentencia en cierto caso.�
En muchas ocasiones y pr�cticamente en todas aquellas donde el caso tenga un impacto sensible en la opini�n p�blica, la justicia estar� bajo las presiones de �lo pol�ticamente correcto�.�
Precisamente la pol�tica tiene un efecto respecto de como la gente �percibe� la justicia -que insisto en nuestro pa�s se reduce a la mera aplicaci�n de leyes-.�
Este efecto es el que, de acuerdo a los intereses pol�ticos del momento y lugar determinado, habr�n en gran medida de determinar lo que ha de entenderse por resoluci�n justa.�
As� es como las circunstancias o requerimientos pol�ticos, habr�n de influir para que en un caso se investigue r�pidamente un homicidio, por ejemplo, o en otros casos se haga con la mayor lentitud posible, pues la percepci�n de justicia es la que ser� importante no tanto el contenido o la decisi�n misma.�
La justicia hoy, debe ser lo suficientemente capaz de abrirse paso entre las propias leyes, su sentido natural debe ser el que prevalezca y no ser el resultado de lo pol�ticamente correcto, al contrario, ser determinante de lo pol�tico.�
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Dr.Octavio Martinez Camacho.�
Abogado Penalista Socio del Despacho HMSC.�
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