Tras ser iniciada la temporada de siembra, una práctica ancestral para obtener los máximos beneficios de la tierra, se realiza a través de los policultivos, se logra por la suma de todo lo que se puede sembrar en una parcela de esquema temporal y los resultados pueden ser muy provechosos para los campesinos, pero es también una actividad que poco se ve ya en la región, aseguran productores del municipio de Coyotepec, Estado de México.
Los campesinos señalan que actualmente es casi inexistente esta práctica, primero por el abandono generalizado en el que se encuentra el campo, los sistemas de riego, la poca rentabilidad de esta actividad, aunado a la gestión casi nula para el subsidio y también al uso de maíz genérico, maíz mejorado o hibrido que no es otra cosa que un maíz estéril que no preserva la diversidad genética y solo se cultiva en parcelas de sistema de riego porque necesitan mucha agua, pero se aprovecha solo para el ganado.
Los beneficios que aporta un policultivo es primero para la alimentación y luego para la comercialización, los rendimientos no son iguales que el monocultivo de maíz que se acostumbra en la región, lo que lo hace productivo es, además de la cosecha, obtener forraje para los animales, evitar la inversión en químicos para el desarrollo de la planta y lo mejor es que aporta nutrientes a la tierra, así lo expresa el agrónomo Ángel Gutiérrez Gómez del municipio de Coyotepec, quien emplea esta técnica que comparte con algunos agricultores.
Ante la insistente propuesta del agrónomo para retomar esta actividad, indica que se debe capacitar para trabajar este esquema de cultivo múltiple con el objeto de ayudar a emprender un proyecto alternativo que de sustento y deje rendimientos; puede dar alimento a una familia o la opción de comerciar todos los excedentes, “los campesinos ya tienen la experiencia y el espacio para realizarlo”.
El policultivo es aquel tipo de agricultura que usa para diferentes plantas en la misma superficie, imitando la diversidad de los ecosistemas naturales de planta herbáceas, evitando la carga sobre el suelo agrícola de cultivos únicos.
Aunque requiere más trabajo, tiene muchas ventajas sobre el monocultivo, que por años fue una práctica recurrente en la región, ayuda a evitar las plagas entre otros beneficios, explica que la palabra milpa se ha modificado, actualmente sólo se refiere al maíz, mientras en la edad antigua se refería a un policultivo.
Datos históricos nos proporcionan información sobre la forma en que nativos desarrollaban este sistema con la siembra de maíz, a esta planta se le enredaba el frijol y la calabaza de hojas amplias proporcionaba una estructura sombreada que conservaba la humedad; los frijoles y la calabaza se propaga evitando plagas por la textura espinosa y las malas hiervas, a esto en conjunto le llama cultivos asociados.
Agricultores de municipios aledaños también comparten la experiencia de este tipo de cultivo, comentan que aprovechar la humedad del temporal que se hace desde siglos atrás, es retomar el método tradicional al que antes se le denominaba milpa en donde se combina el maíz con frijol, calabaza, haba o chile y cuando se cosecha se siembra avena.
Acela Montaño