La Secretaría de Seguridad Ciudadana y elementos de la Secretaría de Marina, detuvieron a Alfredo Pozos, ex agente de la extinta Policía Federal y quien lideraba una célula delictiva dedicada al trasiego de droga desde el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) con dirección a Europa.
De acuerdo con las indagatorias, tras el seguimiento de dos robos de contenedores en el AICM ocurridos el 2 de enero y el 14 de mayo del 2024, la policía halló que los responsables extraían los contenedores en vehículos propiedad del aeropuerto y, en las inmediaciones del estacionamiento lo subían a camionetas de carga en los que los llevan a domicilios ubicados en la alcaldía Venustiano Carranza.
Se supo que los contenedores eran modificados con techos falsos y dobles fondos donde ocultaban los tabiques de cocaína en piedra y polvo para su traslado en vuelos internacionales, principalmente a Europa.
Tras hacer el análisis de las cámaras de videovigilancia en la zona, se pudo saber que el contenedor de equipajes fue trasladado en un vehículo propiedad del aeropuerto al exterior donde fue abordado a una camioneta de carga.
Al seguir con las investigaciones, se supo que el 14 de mayo, los integrantes de dicha célula delictiva, posiblemente robaron otro contenedor bajo el mismo modus operandi.
Se identificaron varios vehículos que servían de muro para el traslado de las camionetas a diversos domicilios ubicados en la alcaldía Venustiano Carranza.
Con órdenes de cateo otorgadas por un Juez de Control, las autoridades arribaron a dos inmuebles ubicados en la calle Norte 25 y otro en la calle Oriente 156, ambos en la colonia Moctezuma Segunda Sección, en Venustiano Carranza.
Se aseguraron 499 dosis de un polvo blanco similar a la cocaína, dos bolsas con la misma sustancia en su presentación en piedra, 71 cartuchos útiles de diversos calibres, un arma de fuego corta abastecida con seis cartuchos útiles, una camioneta color rojo, un vehículo color azul y dos equipos telefónicos.
También, fueron asegurados dos contenedores vacíos, con logotipos de una aerolínea y números de serie grabados, uno de ellos que estaba en proceso de modificación y alteración del techo para colocar un doble fondo y poder ocultar la aparente droga que posteriormente era llevada principalmente en vuelos dirigidos a Europa.
Javier Ruiz