En la Catedral de San Jos� en la capital mexiquense, el Arzobispo Primado de M�xico, Carlos Aguiar Retes, impuso el Palio al Arzobispo de Toluca, Ra�l G�mez Gonz�lez, a casi tres meses de su toma de posesi�n.
Acompa�ado por Arzobispos y Obispos de la entidad y de todo el pa�s, Monse�or Ra�l G�mez Gonz�lez, jerarca cat�lico de la Arquidi�cesis de Toluca, recibi� este ornamento religioso de manos del Papa Francisco, el 29 de junio pasado, en la festividad de los santos ap�stoles Pedro y Pablo, en El Vaticano, art�culo sagrado que le fue impuesto en medio de una notable ceremonia religiosa.
El evento lit�rgico fue realizado en la Catedral de San Jos� en Toluca, ubicada en el centro hist�rico, en una misa que consisti� en una procesi�n encabezada por G�mez Gonz�lez. Un ritual de alto significado para la feligres�a cat�lica toluque�a.
Despu�s de besar el altar, incensar el altar mayor y hacer la se�al de la cruz, el Arzobispo Primado de M�xico se sent� en una silla especial, hasta donde el nuevo arzobispo se arrodill� para refrendar su fe y compromiso con sus semejantes.
La colocaci�n del palio que consiste en una faja de lana blanca ancha, adornada por seis cruces y dos orlas de seda negra, cuyas extremidades se apoyan sobre el pecho y sobre los hombros del arzobispo, simboliza la bendici�n y reconocimiento del Papa a los obispos como sucesores de los ap�stoles.
Ante invitados como el Gobernador, Alfredo Del Mazo Maza y su esposa, Fernanda Castillo de Del Mazo, alcaldes del Valle de Toluca, el arzobispo Ra�l G�mez manifest� su gratitud al se�or por llamarlo a este servicio, pues se dijo un simple servidor en su reino y en su iglesia.
Pidi� continuar en la unidad, fortalecer los s�mbolos de comuni�n eclesial, pues ahora adquiri� un mayor compromiso de servicio y trabajo pastoral con los fieles y con los obispos de la Provincia Eclesi�stica de Toluca, a la cual pertenecen la Arquidi�cesis de Toluca, las Di�cesis de Atlacomulco, Tenancingo y Cuernavaca.
“En nuestra consciencia de pastores no dejamos de escuchar el llamado a hacer de nuestra iglesia una casa de comuni�n, pues solo en la uni�n y comuni�n se podr� guiar realmente hacia Cristo al pueblo”.
Laura Vel�squez