La se�ora Tita Bravo, exsuegra de In�s G�mez Mont, convoc� la presencia de los medios de comunicaci�n para pedirle a la conductora de televisi�n que se entregue a las autoridades y le deje ver a sus cuatro nietos: In�s, de 13 a�os, y los trillizos Bruno, Javier y Diego de 9.
�Nuestro objetivo de la familia es ver a los nietos, es lo �nico que pedimos, no queremos ni rob�rselos, ni secuestrarlos ni nada, porque nosotros no somos secuestradores ni v�ndalos. Todos estamos muy preocupados por todo lo que est� pasando, que el se�or y la se�ora, que si firm�, que si no firm�, que si robaron no s� cu�nto y parece ser que lo que sabemos es que est�n pr�fugos de la justicia�, dijo Bravo.
Sobre el tema de los menores, Tita afirm� que puede comprobar que su hijo actualmente le sigue depositando 100 mil pesos mensuales a su ex por cada uno de sus hijos como parte de la pensi�n alimenticia.
Al respecto del mensaje donde asegur� que tanto In�s como su esposo e hijos ya estaban en M�xico tras fugarse de las autoridades en septiembre pasado, la se�ora explic�: �Tenemos un amigo en com�n, el esposo de la se�ora In�s, que yo conoc� hace much�simos a�os, y pues mis fuentes de Miami, o sea, fueron las que me marcaron por tel�fono para comentarme, o sea supuestamente ella est� ya aqu� en M�xico, �en d�nde?, no s�, puede estar en casa de la mam�, en casa del pap�, en casa de la comadre, o sea, exactamente no s�.
Asimismo, asegur� que hasta ahora no ha recibido ning�n tipo de amenazas por la informaci�n que filtr� sobre el presunto paradero de su exnuera, y se dijo dispuesta a colaborar con la polic�a en caso de ser necesario. �Por supuesto que s�, �claro!, yo digo las cosas como son, �c�mo puede estar huyendo toda la vida con los ni�os que son menores de edad, ella dice que no debe nada, entonces aqu� la esperamos �no?�.
Acto seguido, Tita manifest� con voz firme: �Por mis nietos, por favor ya entr�guense, hay que aclarar todo, aclaren dudas, hablen lo que tengan que hablar con sus mejores abogados, y pues la verdad yo no le deseo nada mal�.
In�s y su esposo V�ctor Manuel fueron se�alados por las autoridades de delincuencia organizada, operaciones con recursos de procedencia il�cita y por desviar casi dos mil millones de pesos del erario, escenario que los ha llevado a mantenerse fuera de su hogar sin revelar su paradero.
Agencia M�xico