No obstante que nuestro pa�s, y pr�cticamente el mundo atraviesan por una crisis econ�mica terrible ocasionada por la pandemia de COVID-19, parecer ser que esto no detiene la tendencia econ�mica de intercambio comercial internacional.
Cerraron aeropuertos y puertos, pero ello no impidi� que muchas operaciones pudieran ser llevadas gracias a la tecnolog�a.
As� que la tecnolog�a, en esta crisis, se consolid� como la gran ventana de conexi�n internacional entre otras cosas, para la realizaci�n del comercio.
La visi�n comercial en general tanto de las econom�as es de expansi�n y globalizaci�n. Es decir, de que por ejemplo, los productos de una industrial o empresa, lleguen y se vendan en otros pa�ses. La importancia y exportaci�n juega un papel fundamental en el crecimiento econ�mico de un pa�s.
De esta forma, podemos acceder a productos manufacturados en otros pa�ses a precios casi similares al costo que tendr�an en los lugares de origen.
La expansi�n del mercado casi nos obliga a pensar de esta forma. �Por qu� raz�n?
Pensar globalmente es el resultado de que los productos que el consumidor tiene a su alcance son en gran medida y proporci�n hechos en otros pa�ses. As� que, si yo hoy decido manufacturar o producir cierto producto debo tener en mente, que la competencia de mi mercado, estar� establecida no solo por otros productos que otros connacionales hagan sino tambi�n por aquellos que vienen de otros pa�ses.
As� que el pensamiento globalizado y la idea de globalizaci�n es una constante e inexcusable variante econ�mica.
Esto pues no puede prohibirse o evitarse.
Y aqu� es donde precisamente en pleno siglo XXI muchos pa�ses le tienen miedo a la globalizaci�n.
�Cu�l es la raz�n?
Bueno pues una muy sencilla de entender. La competencia.
El gran miedo que tienen las econom�as internas es competir. Y adem�s hacerlo en desventaja.
La realidad de los pa�ses por ejemplo de Am�rica central y Sudam�rica, es que compiten en real y clara desventaja frente a econom�as de Europa, Asia o Norteam�rica.
La raz�n fundamental. El atraso tecnol�gico.
Y tristemente, esta desventaja no solo es en relaci�n a practicas comerciales o de mercado. No, la realidad es que tambi�n impacta en aspectos como el intercambio cultural o educativo.
En Asia por ejemplo hoy est�n tomando clases los ni�os asistidos de tecnolog�a de vanguardia a diferencia de otros pa�ses donde no tienen electricidad.
El temor que esto genera es claro por la desventaja en la que al final nos encontramos econ�mica o educativamente, que en un plano de competitividad, salimos perdiendo.
Hoy nuestro pa�s por ejemplo requiere una educaci�n desde una perspectiva de globalizaci�n, sin el temor que nuestras carencias pudieran generarnos frente a otros pa�ses y al final, otros individuos.
Abogado Penalista Socio del Despacho HMSC.
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