RETRIBUCIONES EQUITATIVAS, UN PENDIENTE
Generar condiciones de igualdad en materia laboral entre hombres y mujeres, es una de las materias que tanto autoridades como sociedad tenemos pendientes; y alcanzar a cubrir esta demanda es un trabajo que debe ser motivo de atención por parte de todos los niveles.
De acuerdo a información proporcionada en diversos foros por organismos e instituciones, el trabajo de cuidados en el hogar ocupa una gran parte del tiempo de las mujeres que lo realizan, la mayoría de las veces no tiene una remuneración y genera un estigma negativo dentro de la sociedad.
De acuerdo a la encuesta realizada por OCC Mundial Centro de Carrera Profesional en Línea, 41 esta situación es más compleja para el sector femenino, ya que la proporción de mujeres en situación de pobreza se acentúa para aquellas que dedican más tiempo a tareas del hogar no remuneradas. Por ejemplo, 41 por ciento de las mujeres que dedican más de cuatro horas semanales a estas actividades se encuentran en condiciones de pobreza, comparado con 33 por ciento de los hombres. Además, cinco de cada 10 no cuentan con acceso a seguridad social para sí mismas o para sus familiares.
Hoy, cambiar y revertir estas condiciones, es uno de los principales retos que se deben resolver a través de políticas laborales públicas efectivas y que tengan impacto directo dentro de la iniciativa privada.
En la actualidad, las mujeres se enfrentan a una mayor la complejidad de contar con un empleo con una mayor retribución que sus pares masculinos, por ello, muchas de ellas optan por integrarse al mercado informal. De acuerdo al colectivo “México ¿cómo vamos?”, por cada 100 hombres en pobreza laboral en México, hay 111 mujeres en esta situación; una desproporción que debe ser atendida en beneficio de nuestro país.
Con base a datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), de trabajar para alcanzar una paridad laboral entre hombres y mujeres, la riqueza de México por habitante podría aumentar un 22% en el horizonte de 2060 si se anulara la brecha de género en el mercado laboral por lo que se refiere a las diferencias en la tasa de actividad y en el número de horas trabajadas entre hombres y mujeres.
Desde el sector económico consideramos que las respuestas deben surgir desde tres vertientes; desde el gobierno con políticas públicas dirigidas a atender esta problemática, desde el poder legislativo con una legislación que facilite la contratación por ciertos períodos y desde el sector económico con una flexibilidad total para la generación de fuentes de trabajo.
Dentro de la región de América Latina la participación de las mujeres es fundamental para el funcionamiento de los hogares ya que realizan hasta el 75 por ciento de todo el trabajo dentro de sus hogares, lavar, planchar, limpiar, cocinar y cuidar a otras personas. Retribuir y reconocer su contribución para la sociedad dentro del mercado laboral formal, nos permitirá alcanzar un mayor desarrollo como nación.
H Grupo Editorial