Myrna García Morón presentó su informe anual de actividades al frente de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México y ahí dijo una frase que puede ser el emblema de su labor al frente del organismo.
“En la Comisión se ejerce una autonomía con respeto, pero sin sumisión”. Esta filosofía le ha permitido destacar en ámbitos donde la presencia de la Codhem resulta inesperada, como los relativos a Ley de Amnistía, ya que en 2022 la CODHEM recibió 776 solicitudes, que sumadas a las de 2021 totalizan 3 mil 492; de ellas, 2 mil 406 fueron resueltas.
Y es que este organismo trabaja en coordinación con los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial y así es como consigue avanzar.
Una visión realista, con la base de un gran conocimiento técnico llevan al organismo a ser un verdadero garante, como lo merecen los mexiquenses.
Emergencia ambiental
La normalidad en el Valle de Toluca es la constante de contaminación del aire, un problema grave que nos empeñamos en ignorar hace demasiado tiempo.
Muchas personas insisten en que es una exageración que las autoridades apliquen medidas de control como los operativos de revisión de la verificación vehicular.
Es necesario hacer entender a los ciudadanos que la contaminación en el Valle de Toluca no es un problema menor y que es este el momento de aplicar un plan real que nos ayude a mejorar la calidad del aire.
Hay grupos vulnerables que corren más riesgo que otros, pero todos estamos en peligro y la situación se agrava cada día que dejamos pasar sin buscar una solución.
Hoy, la discusión no debería ser acerca de si es necesario o no aplicar el hoy no circula y vigilar la aplicación de la verificación vehicular, sino acerca de cómo y cuándo empezar a aplicarlo.
Es obvio que el Valle de México tiene una sociedad más politizada que está ya hace años consciente de la importancia de estos programas, pero el Valle de Toluca aún se rehúsa.
Habría que empezar por hacer saber a los ciudadanos que la Contingencia Ambiental, cada vez más común, es una medida extraordinaria, pero la mala calidad del aire no es excepcional, sino ya una constante en esta región.
Los incendios son la gota que derrama el vaso, pero no son los causantes principales de la contaminación, sino la enorme cantidad de autos que circulan a diario por el centro de la entidad.
El gobierno estatal tiene que liderar este trabajo, empezar por difundir estudios que indiquen el problema que vivimos, el origen de éste y que busquen la manera adecuada de resolverlo.