Sin pena ni gloria
Ayer en el Congreso mexique se fue aprobado el Plan de Desarrollo del Estado de México para los próximos años, en los que gobernará Delfina Gómez.
Habrá tiempo de analizar el documento para conocer el sentido y el rumbo que tomará el gran Estado de México, después del cambio de régimen y por primera vez con una gobernadora de izquierda al frente.
Por ahora, lo que llama la atención es que pasó por la Jucopo sin discusión y mucho menos oposición.
Pareciera que nadie le ha avisado al líder de la bancada priísta, Elías Rescala, que hoy es la cabeza de la oposición a Morena.
Se tardó en conseguir presidir la Junta de Coordinación Política y ya que la tuvo ha pasado sin pena ni gloria.
Desaparecido en el pleno, al frente de Jucopo y ya de oposición ni hablamos.
Esta puede ser la última oportunidad de este personaje político de trascender y la está dejando que se le diluya entre los dedos.
Tiempo de equidad
A pesar de movilizaciones, reglamentaciones y leyes en favor de la equidad de género, el atraso en el acceso de las mujeres a la esfera pública y de gobierno es enorme y la desigualdad rampante.
Ahora, en la víspera de la elección más grande de la historia, tenemos la oportunidad de equilibrar la balanza, en los municipios y el Congreso.
Pero, qué tiene que ver el ascenso de las mujeres al poder con la equidad. Mucho más de lo que usted imagina.
Resulta que la visión de las mujeres al cargo de equipos de trabajo y toma de decisiones puede llevar a generar cambios reales, de fondo, que no solo tengan que ver con arrebatar espacios, sino con sembrar una forma distinta de ver la vida, el trabajo, el gobierno y la administración pública.
Más datos. Hasta ahora, los únicos estados donde los municipios son más gobernados por mujeres que por hombres, son Baja California, Baja California Sur y Quintana Roo, mientras que en la Ciudad de México hay una distribución paritaria de las alcaldías, con ocho y ocho.
Sin embargo, en las entidades donde hay más municipios, la disparidad es mayor. Así, el Estado de México está en segundo lugar, con 37 por ciento de las alcaldías dominadas por ellas, lo que significa 46 mujeres y 78 hombres
Mientras no haya más mujeres en el poder, no será posible desterrar las ideas machistas que frenan el avance femenino en general y seguiremos escuchando argumentos chatos y miopes como que el aborto o las políticas públicas dirigidas a fortalecer las familias o las relativas a mejorar la seguridad en calles, avenidas y transporte público, son asunto de mujeres.
Ese tipo de perspectiva arcaica y anquilosada es la que, como conjunto social, arrastramos como cadenas a los tobillos. Es bastante sencillo, frenar el desarrollo, la productividad y el crecimiento de más de la mitad de la sociedad es como darse un balazo en un pie y nuestros gobernantes llevan siglos cojeando de ese mismo pie.
Martha González Aguilera