La revocaci�n de mandato en nuestro pa�s ha sido objeto de todo tipo de opiniones; hoy por hoy seguimos escuchando debates respecto de la conveniencia, o no, de participar en ella. No faltan las voces que la critican, porque m�s que revocaci�n parece ratificaci�n de mandato; y desde luego, tampoco son menos las voces que la apoyan, porque se trata de un instrumento in�dito de democracia directa.��
En medio de todos estos puntos de vista, y sea cual sea nuestra posici�n respecto de este ejercicio, �estamos en presencia de un ejercicio democr�tico, con posibilidades reales y jur�dicas de aplicar para este sexenio?��
Empecemos por lo b�sico: el actual presidente de M�xico, Andr�s Manuel L�pez Obrador, fue electo en el a�o 2018, mientras que el Decreto por el cual se reformaron y adicionaros diversas disposiciones constitucionales fue publicado el 20 de diciembre de 2019, entrando en vigor un d�a despu�s. �Esta reforma le resulta aplicable al sexenio ya iniciado?��
Y aunque la respuesta parece contenerse en el texto del propio Decreto reformador, el cual establece la posibilidad de que la revocaci�n de mandato se solicite respecto del periodo constitucional 2018-2021, la cuesti�n no es tan obvia como parece.���
En estricto sentido jur�dico, y ante la afectaci�n que pudiera causar un resultado no esperado y poco probable (pensemos que hipot�ticamente triunfa la opci�n de revocar el mandato con un resultado vinculante), ser�a v�lido que el presidente acudiera ante la instancia judicial con el argumento de la no aplicaci�n retroactiva de la norma jur�dica en perjuicio de su mandato constitucional (consolidado mas de un a�o antes de la entrada en vigor de esta reforma), menudo problema tendr�a frente de si nuestro tribunal constitucional. Desde el punto de vista de la interpretaci�n y argumentaci�n constitucional y legal, existen buenos argumentos para defender cada una de las posturas contrapuestas.���
Y es que m�s all� de lo posible, o no, de este ejercicio hipot�tico; su utilidad radica en que podr�a tratarse de un �as bajo la manga� que nos ayude a entender por qu� nuestro primer ejercicio de revocaci�n de mandato en M�xico sucede m�s como un ejercicio de ratificaci�n al poder actual.����
En resumen, se trata de un ejercicio donde el presidente L�pez Obrador podr�a aplicar el dicho �no hay nada que perder� y tal vez -s�lo tal vez- � s� mucho por ganar�. Esto es as�, pues no solo se sabe que es poco probable (por no decir casi imposible) que el ejercicio conduzca a una revocaci�n de mandato, sino que adem�s cuenta con un argumento jur�dico que posibilita -ante un escenario adverso- que la norma no le resulte aplicable.�
�Sabr� el presidente y su equipo esta posibilidad? �Estar�n jugando un juego que saben no hay forma de perder? Sin duda, en palacio nacional saben y entienden de pol�tica y derecho �por qu� insistir� la oposici�n en acusar su ignorancia y no mejor en evidenciar los usos que dan a dicho conocimiento? �A qui�n le conviene m�s un �mal resultado� en este primer ejercicio de revocaci�n de mandato?�
Por: Fernando Roberto Z��iga Tapia�
Twitter: @ZuFerTapia�
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