Cultura
Alberga Museo Virreinal de Zinacantepec colecci�n de armas enastadas, armaduras y cascos.
Uno de los museos que conjuga historia, arte y misticismo es el Virreinal de Zinacantepec, el cual tiene una arquitectura del siglo XVI y 40 a�os de ser un espacio abierto, con diversas actividades que han permitido el desarrollo cultural del p�blico.
Como parte de las actividades que organiz� por su 40 Aniversario, el Museo Virreinal present� una serie de charlas sobre su acervo y la �ltima de ellas estuvo a cargo del Cristian Pablo Miguez Mu�oz, quien comparti� datos sobre las armas y armaduras de los conquistadores.
Fundador y l�der del grupo de estudio de Arma M�xico, experto en espadas, escudos, dagas, lanzas, armaduras europeas y con conocimiento en restauraci�n y conservaci�n de armas y armaduras, Miguez se bas� en ilustraciones, c�dices y escasos hallazgos arqueol�gicos para presentar esta charla.
�En el C�dice Florentino se confirma el uso de lanzas, la forma de la cabeza es un poco romboidal y parece ser que hab�a una amplia variedad de lanzas y confirmamos la presencia de alabardas que no son m�s que una combinaci�n de una lanza con un hacha y un pico y un elemento interesante que encontramos es la parte inferior de la lanza, en forma de pico, que nos sugiere que pod�a usarse tanto a caballo como a pie�, coment� respecto del tema armas ofensivas.
Cabe destacar que el Museo Virreinal cuenta con una colecci�n de armas enastadas, que incluye lanzas, es dif�cil catalogar exactamente a qu� fecha pertenece cada una de ellas, excepto por algunos elementos muy caracter�sticos.
�Tambi�n en el Museo tenemos dos alabardas muy lindas que, por sus caracter�sticas, sabemos que fueron hechas para el combate, incluso, por el estilo de la cabeza del hacha de una de ellas, la podemos rastrear en esta fecha de la conquista temprana y es muy probable que haya visto combate aqu� en tierra mexicana�, agreg� el especialista.
Distintas espadas
�Retomando los C�dices Azcatitl�n (1530), Dur�n (1579) y Florentino (1585), se puede ver el uso de distintas espadas y empu�aduras en esta etapa muy temprana del Renacimiento.