Durante la temporada de calor, como primavera y verano, en que aumenta la temperatura ambiental, las enfermedades diarréicas, el cólera o golpes de calor, llegan a incrementar entre un 65 y 80 por ciento, informó María Fernanda Serrano López, jefa del departamento de Promoción de la Salud, del Instituto de Salud del Estado de México (ISEM).
Señaló que la más común es la diarrea y se debe principalmente a una mala manipulación de los alimentos y/o la falta del lavado adecuado de manos; detalló que con el calor, la descomposición de los alimentos puede ser más rápida, por lo que se debe tener mayor cuidado y vigilancia al consumirlos.
Por ello, recomendó seguir las cuatro medidas básicas, que son lavar con agua y jabón y desinfectar frutas y verduras.
Atención oportuna
Para evitar llegar a cuadro graves como una gastroenteritis o deshidratación fuerte que requiera hospitalización, indicó que es importante la detección de los síntomas de la enfermedad y atenderse con un médico.
Por ello, explicó que los principales signos son deshidratación, piel seca, sed intensa, dolor de cabeza, vómitos consecutivos y algún cuadro de diarrea, los cuales son muy importante atender de manera oportuna y adecuada.
Afectaciones a la piel
La piel, dijo, también puede sufrir daños en la temporada, siendo la más recurrente quemaduras de primer grado, y en casos más extremos, úlceras o ámpulas.
“Hay que tener mucho cuidado, no esperarse, importante tener en cuenta que no deben automedicarse cuando lleguen a presentar este tipo de signos y acudir lo más pronto posible al Centro de Salud más cercano”
María Fernanda Serrano López
Jefa del departamento de Promoción de la Salud, ISEM
Areli Díaz