Quiz� sin propon�rselo, o tal vez con toda la intenci�n, el presidente Andr�s Manuel L�pez Obrador ech� a rodar la bola de nieve que representa la sucesi�n presidencial, aunque faltan tres largos a�os.
Es evidente que los resultados electorales del 6 de junio, y los sucesos extraordinarios de los �ltimos meses, entre ellos la ca�da del convoy en la l�nea 12 del Metro, le han obligado a desviar la atenci�n de la opini�n p�blica, y entonces adelant� en cierta medida el proceso.
Desde el principio de su gesti�n ha dejado en claro que s�lo tiene dos personas a las que considera como las �nicas en quien depositar�a su confianza para heredarles el poder: la jefa de gobierno de la Ciudad de M�xico, Claudia Sheinbaum, y el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaub�n.
Hay que recordar que este sistema de selecci�n de candidatos lo instaur� Plutarco El�as Calles, fundador del Partido Nacional Revolucionario, conocido en nuestros d�as como Partido Revolucionario Institucional. Funcion� a la perfecci�n hasta 1994, cuando Carlos Salinas design� primero a Luis Donaldo Colosio y luego a Ernesto Zedillo como sus sucesores.
Ernesto Zedillo abri� el abanico y al final opt� por Francisco Labastida Ochoa, pero fue derrotado en las urnas por Vicente Fox que quiso y no pudo, al igual que su sucesor Felipe Calder�n, heredar la presidencia.
Enrique Pe�a Nieto impuso la candidatura de Jos� Antonio Meade, pero con eso s�lo abri� a�n la distancia entre los grupos del PRI, lo que permiti� el arrollador triunfo de L�pez Obrador. Bueno, eso entre otros factores.
Muy al estilo de Luis Echeverr�a, el presidente Andr�s Manuel tiene muy controlados todos los hilos de la pol�tica nacional, nada sucede sin que �l lo sepa y todo se mueve a su gusto y conveniencia. As� que no es extra�o que haya abierto el proceso para buscar a quien lo suceder� en la presidencia.
Al final de cuentas en tres a�os pueden pasar muchas cosas. La rueda de la fortuna pol�tica puede dar giros insospechados y quiz� dentro de tres a�os estemos discutiendo una ampliaci�n del periodo presidencial de Andr�s Manuel L�pez a obrador o su reelecci�n, en lugar de buscar a quien lo suceda. Puras especulaciones hasta ahora.
Como quiera que sea, este caso s�lo se trata de un distractor m�s, de esos que acostumbra lanzar el mandatario, que vuelve a dar muestras de por qu� lleg� a la presidencia.
En el Estado de M�xico est�n m�s ocupados y preocupados por ver qui�n ser� el sucesor del mandatario mexiquense Alfredo Del Mazo Maza y tambi�n, muy a su estilo, discreto, empez� a mover sus piezas al interior de su equipo y del partido para analizar qui�n ser� el aspirante que propondr� a los m�s de 12 millones de ciudadanos que podr�n votar, tambi�n en 2024.
No hay que olvidar que coloc� como suplentes de diputados locales a algunos integrantes de su gabinete, por lo que pueda ofrecerse en los meses venideros, lo que anticipa una serie de movimientos que seguramente ser�n muy interesantes. Conforme vayan d�ndose nos ofrecer�n pistas de hac�a donde se dirigen los afectos del mandatario estatal.
En este caso falta mucho menos tiempo y todo se acelerar� a partir de los inicios del a�o entrante. Quiz� con un gobernador interino o ampliaci�n de mandato por un a�o por parte de la Legislatura, para empatar las elecciones de gobernador y presidente en 2024.
Diana Mancilla �lvarez