Tom Flores es uno de los principales encargados de que la National Football League (NFL) e hispanoamérica tengan un lazo tan estrecho. Pues el mexicano logró crear un vínculo con el público latinoamericano tanto en su etapa como jugador, pasando a ser entrenador asistente y finalmente levantando dos títulos de Super Bowl como entrenador en jefe.
El vínculo mexicano de Tom Flores
A pesar de que Tom Flores nació en Sanger, California, es hijo de padre duranguense que migró al estado soleado cuando tenía 12 años y de madre nacida en California pero cuyas raíces se remontan al estado de Jalisco. Pese a estar orgulloso de sus orígenes, Flores está convencido de que fue contratado por los equipos de la NFL por “su talento y no por pertenecer a una minoría”
“No era algo importante cuando empecé. Nunca pensé en ello. Jamás imaginé que me habían contratado por mi origen étnico. Me contrataron por lo que podía hacer en el campo como jugador y como entrenador. Todavía lo creo así”. Previo a jugar en la NFL, Tom fue profesor de secundaria, sin embargo, al obtener una oportunidad en el futbol americano no dudó en aprovecharla para hacer historia.
Su impacto en la NFL
Tom Flores comenzó su carrera en la NFL en 1960 cuando superó a 10 compañeros para convertirse en el quarterback titular de los Oakland Raiders. No obstante, en la temporada 1962 tuvo que superar una tuberculosis y mientras estuvo alejado de los emparrillados vendió fuegos artificiales, obtuvo una licencia como vendedor de bienes raíces y trabajó como periodista deportivo para el Oakland Tribune.
Información
Flores fungió como entrenador de receptores abiertos de 1972 a 1978, ganando un Super Bowl bajo el liderazgo de John Madden en 1976, cuando los Raiders se impusieron a los Vikings en la edición XI de la Fiesta Grande.